Dieta BARF para Perros ¿Es buena para tu peludo?

Tal vez habrás escuchado en algún momento acerca de la dieta BARF para perros, una tendencia que a diario gana más popularidad entre los petlovers. 

Si bien es una dieta que tiene una serie de beneficios para tu mascota, debes saber que hay algunas reglas que debes seguir para sacarle todo el provecho posible y mantener a tu amigo de cuatro siempre saludable.

A continuación, Ladracadabra te contará más acerca de la dieta cruda BARF para perros y cómo puedes dársela a tu perro.

En Ladracadabra tenemos consejos para tu mascota. Tal vez te interese leer: Comida casera para perros: hazlas sin morir en el intento.

¿Qué es la dieta BARF?

BARF significa Biologically Appropriate Raw Food, que se traduce como «Alimentos Crudos Biológicamente Apropiados«. Se basa en ofrecer a tu perro una alimentación similar a la que consumiría en estado salvaje, compuesta principalmente por carne cruda, huesos carnosos, vísceras, frutas y verduras.

En esencia, busca imitar la dieta ancestral de los perros, proporcionándoles alimentos frescos y sin procesar que se ajustan a sus necesidades biológicas.

¿Qué alimentos entran en la dieta BARF?

Carnes:

• Carne magra cruda: Aproximadamente el 70%. Aporta proteínas, aminoácidos y vitaminas esenciales. Incluye carne roja, blanca, aves y pescado.
• Hígado: Alrededor del 5%. Rico en vitamina A y otras vitaminas hidrosolubles.
• Otros órganos: Aproximadamente el 5%. Proporcionan minerales y vitaminas. Algunos ejemplos son el riñón, el bazo y las glándulas.

Huesos:

• Huesos crudos comestibles: Alrededor del 10%. Son fuente de calcio, fósforo y otros nutrientes. Se deben de moler.  Recuerda: Nunca dar huesos cocidos.

Verduras y frutas:

• Verduras: Aproximadamente el 7%. Aportan fibra, vitaminas y minerales. Algunas opciones: brócoli, espinacas, zanahorias, calabacín.
• Frutas: En pequeñas cantidades debido al azúcar. Algunas opciones: manzanas, peras,banano, sandía, arándanos, uvas y demás.

Otros:

• Semillas y frutos secos: Aproximadamente el 2%. Se deben remojar y moler antes de darlos. Proporcionan ácidos grasos esenciales, vitaminas y minerales como las nueces, las almendras, las avellanas

Recomendaciones para hacer una dieta BARF para perros

• Las proporciones mencionadas son una guía general y pueden variar según la edad, raza y estado de salud del perro.
• Consulta con un veterinario antes de iniciar una dieta BARF para tu perro.
• Asegúrate de obtener los ingredientes de fuentes confiables y manipularlos con cuidado para evitar la contaminación bacteriana.

¿Cómo se hace la dieta BARF?

Planificación y conocimiento:

1. Consulta con tu veterinario: Es fundamental la asesoría de un veterinario para evaluar las necesidades específicas de tu perro y descartar posibles contraindicaciones.
2. Investiga y aprende: Familiarízate con los principios de la dieta BARF, los alimentos adecuados y las proporciones recomendadas para cada etapa de vida.
3. Elabora un plan de alimentación: Crea un menú semanal variado y equilibrado que incluya todos los grupos de alimentos necesarios.
4. Calcula las porciones: Ajusta la cantidad de comida según la edad, raza, nivel de actividad y estado de salud de tu perro.

Ingredientes de calidad:

1. Carnes frescas y magras: Elige carnes de alta calidad, provenientes de fuentes confiables y aptas para el consumo humano.
2. Huesos carnosos crudos: Busca huesos blandos y comestibles, como los de pollo o pavo, y evita huesos cocidos o astillados.
3. Frutas y verduras frescas: Lava y corta las frutas y verduras en trozos pequeños para facilitar su digestión.
4. Órganos y vísceras: Incorpora variedad de órganos como hígado, riñón y corazón, en pequeñas cantidades.
5. Suplementos: Considera agregar suplementos vitamínicos y minerales según las recomendaciones de tu veterinario.

Preparación segura:

1. Manipula los alimentos con cuidado: Lava bien tus manos y las superficies antes y después de manipular los alimentos crudos.
2. Descongela correctamente: Descongela las carnes y otros ingredientes en la nevera o en agua fría, nunca a temperatura ambiente.
3. Higiene en la cocina: Mantén la cocina limpia y desinfectada para evitar la contaminación cruzada.
4. Almacenamiento adecuado: Conserva los alimentos refrigerados o congelados en recipientes herméticos.

Monitoreo y ajustes:

1. Observa las heces: Las heces de un perro con dieta BARF deben ser firmes y bien formadas. Si observas cambios, consulta con tu veterinario.
2. Controla el peso: Monitorea el peso de tu perro regularmente para asegurarte de que mantiene un peso corporal saludable.
3. Realiza exámenes veterinarios: Lleva a tu perro a chequeos regulares con el veterinario para evaluar su peso y si se encuentra consumiendo los nutrientes necesarios para su cuerpo. .

Recuerda: La dieta BARF, cuando se realiza de forma correcta y bajo la supervisión de un veterinario, puede ser una opción saludable y nutritiva para tu perro.

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